
La libélula como animal de poder
La libélula es un animal de gran antigüedad y a pesar de sus pequeñas dimensiones, se le considera un tótem de gran poder.
Siendo un ser viviente que se desplaza por el aire, representa cambios. Sus hermosas e iridiscentes alas son sensibles a la brisa, lo que nos envía el mensaje de que debemos estar atentos a la dirección del viento, ya que se acercan cambios.
Por otro lado, estos curiosos insectos también son criaturas del agua. Pueden vivir en ríos, manantiales, lagos, y cualquier cuerpo de agua. Colaboran considerablemente con el balance del medio ambiente, controlando la población de mosquitos y moscas.
Adicionalmente, la libélula pasa por una fase de larva en el agua por lo que simboliza un vínculo con el subconsciente, los sueños y los pensamientos. Esto se debe a que en el mundo animal, el agua representa a la mente más profunda, y se relaciona con los pensamientos que se nos presentan en periodos de meditación, relajación y sueños.
Cuál es la simbología de la libélula
Para la cultura de los nativos americanos y de los japoneses, estos insectos voladores son el símbolo de:
- La prosperidad
- Buena suerte o fortuna
- Fuerza
- Belleza
- Armonía
- Cambios
- Paz y
- Pureza
La libélula tiene significados adicionales en Japón, para cuyos habitantes simboliza el éxito, la felicidad, la victoria, la fuerza y el coraje.
Este insecto tiene una alta valía en el país nipón, al punto que las familias nobles lo usaron para adornar sus telas, vestidos y muebles, durante el siglo XI. Además, la libélula pasó a formar parte del escudo de los Samuráis.
La libélula como tótem animal
Esta criatura es el poder del color y de la luz. Su primer hogar es el agua y después pasa a surcar y a dominar el aire, simbolizando el ciclo de la vida. Durante su fase acuática experimenta una vida emocional y llena de pasión, para después pasar paulatinamente al aire, que representa la maduración.
Permanece en contacto con el agua durante toda su existencia, lo que significa que las personas con este tótem contarán siempre con un enorme elemento emocional.
La libélula vive en el aire que simboliza la mente, pero regresa al agua constantemente y esta representa la emoción. Como resultado se obtiene un balance ideal entre lo mental y lo emocional.
Adicionalmente, estos animales son augurio de próximos cambios y de adaptación.
Cuando la libélula aparece en tu vida te proporciona una poderosa herramienta de meditación. Esta hace que los pensamientos inconscientes surjan al consciente, para que tengas la oportunidad de resolverlos. Este animal potencia la transformación de tus pensamientos en acciones de gran poder.
Las islas de la libélula
De acuerdo a la leyenda, se dice que el Emperador de Japón sufrió una mordida del insecto conocido como tábano, y que una libélula se comió a dicho insecto.
En honor y como muestra de agradecimiento a la libélula, el país nipón nombró a las islas "Akitsushima", o "Las islas de la libélula".
Actualmente, Japón es una nación reconocida a nivel mundial como uno de los líderes en el campo del estudio de las libélulas.
Por otro lado, la libélula es también un símbolo de que se obtendrá una buena cosecha de arroz. Esta creencia aplica tanto a la agricultura tradicional como a la tradición japonesa.
Otros significados y simbologías
Para los nativos americanos las libélulas actúan como mensajeros de los pensamientos, y se encargan de pedirnos que le prestemos mayor atención a nuestros pensamientos más escondidos y deseos más profundos. Soñar con estas criaturas es de buena suerte.
Si ves que una libélula vuela a tu alrededor, se te acerca mucho, o entra a tu hogar, significa que un cambio está por ocurrir. Es posible que se trate de nuevas personas en tu vida o de amistades que no veías hace mucho tiempo. También se puede tratar de que la fortuna llegará a ti en poco tiempo.
Por otro lado, también se cree que estos insectos nos hacen llegar mensajes llenos de sabiduría y de iluminación. Además, nos permiten comunicarnos con el universo elemental.


Tarot
Psicóloga especialista en psicología de la personalidad. Clarividente experta en rituales y cartomancia. Más de veinticinco años en el mundo profesional del esoterismo.